Superando la dificultad de convivir 24/7
“Educar no es dar carrera para vivir, sino templar el alma para las dificultades de la vida.” — Pitágoras Cuando una familia decide educar en casa, imagina momentos de lectura juntos, proyectos creativos y mañanas sin prisas. Y sí, todo eso ocurre. Pero junto a la belleza del homeschooling aparece también una realidad que a veces no se nombra tanto: convivir 24/7 no siempre es fácil. La convivencia como reto silencioso La escuela tradicional separa: los niños pasan varias horas lejos de casa, y los padres tienen su propio tiempo para trabajar o encargarse de otras tareas. En el homeschooling, en cambio, las horas compartidas se multiplican. Eso significa más risas, más abrazos… pero también más roces, discusiones entre hermanos y momentos en que mamá o papá sienten que necesitan un respiro...